Escriba lo que desea buscar en este blog

jueves, 21 de noviembre de 2013

Conferencia internacional sobre la situacion actual de la economia mundial

Dentro del programa de celebración de la "Bodas de Oro" de creación de la profesión de Ingeniero Economista en el Perú, se aproxima la Conferencia internacional sobre la situación actual de la economía mundial que se transmitirá vía multivideo-conferencia (interactiva), a nivel internacional para que todos los interesados en participar con preguntas o comentarios puedan hacerlo desde cualquier país.

Se invita a todas las Facultades de Ingeniería Económica de las diferentes universidades del Perú a participar desde el Auditorio de la Facultad de Ingeniería Económica de la UNI.

Contactos con el Coordinador Nacional Ing. Luis Vasquez Medina:

Social media ¿Reorganizarse o morir?

Marina zaliznyak, de LBi

Por Marina Zaliznyak, directora de Estrategia y Servicio al cliente de LBi
Rediseñar la compañía para ser digital es, hoy en día, crucial para el éxito futuro de cualquier empresa. Y es que, aunque muchas compañías se asoman y trabajan en este nuevo canal con el ímpetu de un nativo digital adolescente (es decir, atraen, entretienen y recompensan a sus “amigos”, siguen sus consejos, les escuchan, aprenden, les responden en tiempo real, haciendo que todo parezca fácil), la realidad es que las organizaciones tienen que trabajar mucho para operar de forma natural en el medio digital. Y si Coca-Cola o Sony, por ejemplo, hacen efectivo el uso del “Social Media” es porque han rediseñado sus estructuras, procesos y relaciones internas.
En la actualidad, podemos distinguir dos tipos de empresas en el medio digital: aquellas que, aunque han empezado a dar los primeros pasos, pronto se han dado cuenta de que, entre donde ellos están y el horizonte de lo social, existen conflictos internos, provocados por departamentos que trabajan como silos, jerarquías fijas y procesos de aprobación que se dilatan durante periodos excesivamente largos; y otras, cuya forma de hacer marketing recuerda el modelo tradicional, con una fuerza de ventas que trabaja a pie de calle y donde los canales sociales están en silencio y las habilidades digitales todavía no han sido explotadas.
Según el informe “Social Business”, sobre cómo utilizan las empresas los social media y qué cambios implica su uso en términos de estructura, procesos y recursos dentro de las organizaciones, realizado por la IAB en colaboración con LBi en Reino Unido, las grandes empresas son más proclives a implementar prácticas de social business en sus organizaciones. De hecho, en los últimos doce meses, un 73% ya dio algún paso en este sentido. Esto significa, por ejemplo, que adoptaron herramientas de social media en todas las áreas de la empresa para comunicar y conseguir el “engagement” de las audiencias externas entre los que se incluyen clientes actuales, y futuros, proveedores y partners, frente al 59% de las empresas de tamaño medio y el 41% de las pequeñas empresas. La tendencia es la aceleración de esta transformación en las grandes empresas.
En España, a pesar de que las empresas españolas llevan un tiempo avanzando en la adopción de estrategias de social media, como una herramienta más dentro de su estrategia de marketing, comunicación y atención al cliente, la complicada situación que atraviesa la economía nacional ha paralizado este proceso. Hoy, las preocupaciones de las organizaciones giran más en torno a restructuraciones organizativas, con las que dar respuesta a la coyuntura actual, que a la redefinición de procesos y responsabilidades dentro de la estructura empresarial para sacar el máximo provecho de estos canales.
Ya tengo perfiles en las redes y ahora, ¿qué?
Los desafíos son los mismos para todas las empresas; ahora bien, la superación de los mismos puede paralizar incluso a las compañías más exitosas debido al grado de cambios que exige. La mayoría de las organizaciones se ‘asoman’ a lo social con la impresión de que la magia comienza y termina con Facebook o Twitter. Sin embargo, hay un montón de cosas que son más urgentes. Por ejemplo, suponiendo que una empresa tenga las herramientas sociales adecuadas, habría que preguntarse si también tiene las habilidades, el personal y los procesos que las soporten. Si el mundo espera que una marca comunique en una determinada manera, ¿lo puede hacer, y hacerlo lo suficientemente rápido para marcar la diferencia? El desarrollo, la gestión de contenido y la conversación son el centro del negocio social. A medida que aumenta la creación de contenido, así como la calidad y la cantidad exigida, la mayoría de las empresas necesitan actualizar sus estructuras para poder seguir el ritmo.
Muchos son cambios externos, otros, internos y algunos, una mezcla de ambos. Si una marca necesita responder rápidamente a un evento en los media, necesita además estar dotado de los recursos necesarios para hacerlo bien. Si el proceso se divide entre departamentos, el proceso de “tirar todos juntos” no debe tener precedentes. Del mismo modo, si una marca se compromete a generar contenido rápidamente para el espacio digital, por ejemplo, crear un servicio de atención al cliente a través de los canales sociales, donde ningún profesional del marketing puede completamente controlar qué va a pasar, una estructura de aprobaciones puede traducirse en oportunidades perdidas.
Páginas: 1 2
Share     Print       Email

- See more 

Se afianza entre los europeos el consumo alternativo y colaborativo frente a la crisis

Afectados duramente por la crisis económica global y las medidas de ajuste, en años anteriores los consumidores europeos han tratado de controlar sus gastos todo lo posible y no han dudado en recortar los más superfluos, pero ahora ya no basta y, ante el aumento de las dificultades, según detecta el último “Observatorio Cetelem 2013” sobre tendencias y hábitos del consumo europeo, los ciudadanos comunitarios están reaccionando vía consumo alternativo y colaborativo, que se afianza cada vez más en estos países. De esta manera, el trueque, los productos de segunda mano, las compras colectivas, el alquiler, la compra directa del productor, el intercambio de servicios, etc. son algunos de los numerosos fenómenos que ya se han convertido en una realidad para un gran número de ciudadanos europeos.

Carlos Gómez, de CetelemEl informe, llevado a cabo en esta última edición por Cetelem, banco experto en crédito al consumo, en colaboración con el gabinete de estudios y asesoría BIPE sobre la base de las respuestas de más de 6.500 consumidores de 12 países europeos (Alemania, Bélgica, Eslovaquia, España, Francia, Hungría, Italia, Polonia, Portugal, República Checa, Rumanía y Reino Unido), considera, además, que se trata solo del principio de un fenómeno que perdurará algún tiempo más. Así, el consumo alternativo adquirirá cada vez una presencia mayor en nuestra vida durante los próximos años.
En concreto, el mercado de segunda mano, que desde hace décadas ha obtenido respuesta por parte de los consumidores a la caza de antigüedades y rastrillos, ha encontrado en Internet un medio de difusión sin precedentes (el 89% de los europeos consultados afirma utilizar la Red en sus procesos de compra). Comprar un producto de ocasión sigue siendo la mejor manera de conseguir “gangas”, sobre todo en época de crisis. Un acto de consumo que hoy en día abarca al 59% de los europeos, pero que se intensificará hasta el 68% en los próximos meses. En el caso de España, un 63% de ciudadanos afirma comprar actualmente productos de ocasión; cifra que se intensificará hasta el 76% en los próximos años.
Por otro lado, a medida que la oferta cobra fuerza y los fabricantes entran en el juego, los consumidores europeos se adscriben cada vez más al modelo de compra colectiva, nuevamente ayudados por Internet. Aunque, en conjunto, este modelo triunfa en las encuestas de intención de los europeos, las disparidades son importantes entre los países del norte (Alemania y Reino Unido), más reticentes a la idea, y los del sur (con Italia y Portugal a la cabeza), especialmente fanáticos de las agrupaciones de compradores. En el caso de España, un 40% declara realizar actualmente compras en este tipo de páginas; comportamiento que aumentará en los próximos meses hasta un 63%.
También el alquiler frente a la compra es una modalidad de consumo que aún no está demasiado extendida. No obstante, y aunque minoritaria, esta tendencia se expandirá fácilmente en lo que respecta a los equipos que se utilizan esporádicamente, tales como los deportivos, de bricolaje o jardinería: en el futuro, un tercio de los europeos preferirá alquilarlos a comprarlos… y más del 10% preferirá incluso alquilar este tipo de material de forma duradera. España destaca por encima de la media Europea en lo que al alquiler esporádico de material de bricolaje se refiere, con un 37% frente al 33% de media europea.
Sin embargo, es cierto que la alternativa más radical si cabe al sistema de ventas, el trueque de bienes, parece no ser tan popular entre los consumidores europeos hoy por hoy (casi un tercio de ellos lo ha practicado). Sin embargo, las ventajas económicas y ecológicas, así como el placer de intercambiar, lograrán persuadir a más de la mitad de los consumidores de practicarlo en el futuro (un porcentaje de interesados que llega incluso al 75% en el caso de los portugueses y al 55% de los españoles). Paralelamente, el 75% de los europeos (el 73% de los españoles) piensa revender objetos que ya no utilizan.
En cualquier caso, la incertidumbre económica y la falta de voluntad de los consumidores juegan a favor del ahorro europeo. De hecho, el estudio muestra que la intención de aumentar el ahorro está al alza entre la mayoría de consumidores que se lo pueden permitir, si bien dos países precisamente del sur de Europa, España y Portugal, marcan la excepción, pues en ellos la intención de aumentar el ahorro es menor que el año anterior. Esta bajada a contracorriente del resto de países se explica por la situación económica crítica de los hogares portugueses y españoles, que estuvieron a la cabeza de quienes declararon percibir unos ingresos insuficientes para hacer frente a sus gastos (65% y 50%, respectivamente), y también que tendrían que hacer uso de sus ahorros (6 y 11%, respectivamente) o que recurrirían a créditos al consumo para llegar a fin de mes (10 y 6%, respectivamente).

ENTRADAS/SPOTS