Escriba lo que desea buscar en este blog

lunes, 13 de agosto de 2018

Milton Friedman-Karl Polanyi


Milton Friedman-Karl Polanyi


Indice1. Introducción
2. Análisis Diferencias Entre Milton Friedman Y Karl Polanyi
3. Milton Friedman ? Karl Polanyi
4. Fuentes de Consulta
1. Introducción
La perspectiva desde la cual elaboran el análisis, el método utilizado, y en lo conceptual, Milton Friedman y Karl Polanyi, difieren marcadamente en el papel y naturaleza que le atribuyen al mercado.
Sus pensamientos son de gran actualidad.
En el caso de Milton Friedman, dado que sus postulados representan la base fundamental de la práctica económica contemporánea, tan así que el Fondo Monetario Internacional y demás organismos económicos internacionales basan estudios y proyectos en el fundamento teórico desarrollado por Friedman. Pues en el mundo globalizado, donde el capitalismo es el modelo predominante, éste autor es uno de sus mayores defensores bajo sus postulados de libertad económica y libertad política.
La obra de Karl Polanyi permaneció oculta por más de cuarenta años, a finales de la década de 1980 su obra despertó interés, debido a que su inquietud por las consecuencias de la "sociedad de mercado" sigue teniendo actualidad porque con la caída del muro de Berlín y la casi total desaparición de las economías comunistas, el capitalismo que pareció triunfar como único sistema válido para organizar la economía, ante los hechos empíricos de estos años levanta dudas sobre su eficiencia. Algunos investigadores creen que en el mundo que hoy vivimos el simple hecho de tener que sobrevivir en una sociedad donde la opinión del mercado se ha convertido en la máxima autoridad, es necesario superar la dicotomía Estado/Mercado, redescubrir la relación economía-sociedad: cuestión muy compleja por las distintas aristas que presenta la sociedad. Esto los lleva a profundizar el pensamiento de Karl Polanyi, dada la metodología multidiciplinaria, abordada por éste para el análisis de la sociedad de mercado.
2. Análisis diferencias entre milton friedman y karl polanyi
El capitalismo competitivo, es para Milton Friedman la organización económica que en forma directa produce libertad económica. Esta libertad es un fin en sí misma y a su vez un medio indispensable para la obtención de la libertad política, debido a razón que separa al poder económico del político y de esa forma permite que uno y otro se contrarrestren.
Para Karl Polanyi, el capitalismo o economía de mercado conlleva un sistema de mercado autorregualdo; una economía
dirigida por los precio del mercados y nada más. El mecanismo que lo controla, es ajeno a toda voluntad humana. El mercado se regula a sí mismo por imperio de las leyes de la oferta y de la demanda, y para que funcione todos los factores de producción deben formar parte del mercado. Tierra y trabajo se consideraron mercancías para aplicarles las leyes de la oferta y la demanda. Esta subordinación del trabajo que es la subordinación de la actividad de los hombres; esencia de la sociedad, lleva a la subordinación de la sociedad a la economía de mercado.-
Así, mientras para Friedman el capitalismo competitivo evita la concentración del poder económico con el político, mediante la libertad económica como medio que segura la libertad política; para Polanyi, el problema del capitalismo es la subordinación de todas las dimensiones humanas al aspecto económico. Esta subordinación es fruto de organizar las actividades productivas y distributivas mediante un sistema de mercados; pues al confiar el control de la economía a este mecanismo, se renuncia a la posibilidad de dirigir las actividades económicas, y, por tanto, de subordinarlas.
Polanyi explica que para que el mecanismo funcione no debe interferirse: las decisiones de los ámbitos no?económicos de la
sociedad no debe afectar al mercado. Más aún, la sociedad no sólo debía permanecer al margen del mercado, sin entorpecerlo, sino favorecerlo, adaptándose a sus exigencias. Aquí se ve la contundente crítica que Polanyi, respecto a un postulado del cual Friedman es defensor a ultranza, la "no intervención" por parte del Estado y ni de nadie que entorpezca el libre juego de la oferta y la demanda como determinante de los precios que son los que regulan y/o fijan el mercado, a tal punto que le atribuye al Estado el "deber" de arbitrar las medidas para el funcionamiento de las leyes que sirven para cumplir con los incentivos creados por los precio; para la protección del mercado libre; y lo hace responsable de su seguridad, por lo que debe evitar todo aquello que puda generar una deformación del mercado, (vg.: monopolio).
Mirada histórica como fundamento
Milton Friedman, hace un breve retrospectiva histórica en sustento su postura, analizándola desde la libertad política que gozaban o no, las sociedades, para demostrar su vinculación con el mercado libre.
Karl Polanyi por el contrario, efectúa un extenso análisis interdiciplinario de las sociedades, desde las primitivas, hasta las del siglo xix para demostrar que antes del liberalismo, no existió ninguna sociedad cuya economía estuviese controlada por el mercado y por ende ninguna sociedad subordinada o regulada por la economía de mercado.
Para Friedman la historia corrobora la relación entre libertad política y mercado libre, sin encontrar alguna sociedad que en momento o lugar alguno, mantuviera libertad política sin que usara para la organización económica un algún sistema parecido al mercado libre. Da como ejemplo de sociedades con libertades políticas, Grecia en la edad de oro y los primeros tiempos de la era romana sin decir algo siquiera respecto a que ambas derivaron hacia un sistema de corrupción que las llevo a su decadencia, declinación.
Tiranía, servidumbre y miseria fueron el estado típico de la humanidad, y ve que el siglo xix y primera parte del siglo xx, son excepciones que se destacan en el mundo occidental, clara muestra para él, de que la libertad política llegó como consecuencia del mercado libre y el desarrollo de las instituciones capitalistas.
De ello infiere que la historia sugiere que el capitalismo es una condición necesaria para la libertad política, aunque no suficiente, pues reconoce (casi al pasar) que se pueden tener organizaciones económicas fundamentalmente capitalistas que no sean libres en una misma sociedad (tal como la Italia fascista, la Rusia de los zares) y continúa diciendo que "Aún en esas sociedades, los ciudadanos tenían bastantes más libertad que los ciudadanos de un estado totalitario moderno ... porque el capitalismo y la existencia de la propiedad privada, representaba cierto control sobre el poder central del Estado". Dice entonces que, la relación entre la libertad política y la económica, es compleja y no unilateral.
Una gran parte de la reforma política surge con las reformas económicas en la dirección del laissez-faire, cambios en la organización económica que fue seguido de un aumento en el bienestar general de las masas.
En tanto Polanyi trata de demostrar que la economía de mercado no es una consecuencia natural, que la mentalidad de mercado liberal que pretende ver el mercado autorregulado como una consecuencia de la propensión natural del hombre al trueque, al comercio, es absolutamente falaz.
Sitúa en 1830 el momento en que el liberalismo económico deja de ser una cuestión académica, para dar origen a un intenso activismo. En contra de lo que sostenía el liberalismo, dice, "El laissez?faire no tenía nada de natural; ... el propio laissez?faire fue por impuesto el Estado... el laiseez-faire no era un cometido para el logro de algo, sino lo logrado" "A esta paradoja se sumó otra, Mientras que la economía del Laissez-faire era el producto de una acción estatal deliberada, las restricciones subsecuentes al laissez-faire se iniciaron en forma espontánea. el laissez-faire se planeó; la planificación no".
Hace notar que fue el comportamiento de los mismos liberales el que demostró que el mercado autorregulado, lejos de excluir la intervención del Estado, exigía y regularmente los propios liberales pedían imperiosamente intervención, tal el caso de las leyes sindicales y anitmonopólicas
Utilizando el estudio histórico y antropológico, desde las sociedades trivales, intenta demostrar que contra la postura liberal, las motivaciones económicas no son las que movilizan al hombre a producir. Que las motivaciones económicas interactuan con otras. Que las pasiones humanas no se guían por ellas, sino por otras motivaciones.
Respecto a los numerosos e importantes mercados del siglo XVI, señala que éstos se regían por el sistema mercantil, y por tanto aunque de interés para el gobierno, la idea de la autoregulación seguía ausente tratándose todos ellos de mercados locales individuales.
Tal análisis intenta probar que antes de nuestra época los mercados eran solo accesorios de la vida económica, y el sistema económico estaba absorbido por el sistema social.
El nuevo tipo de sociedad, en el que hoy vivimos, surgió para Polanyi, del lassaiz-faire, una reacción del hombre a la máquina. Y los principios del liberalismos fueron impuestos, no una derivación natural como pretendían los liberales.
Distribución según producción ? "mercaderías ficticias"/ motivación económica
Friedman indica que el principio central de la economía de mercado es la cooperación mediante el intercambio voluntario. Los individuos cooperan unos con otros de manera que satisfacen sus necesidades con mayor eficacia. Por ello, la principal función instrumental de la distribución según lo producido, es el conseguir la asignación de recursos sin la fuerza. Esto permite a) que la distribución tenga lugar en forma impersonal, sin necesidad de una autoridad, y b) la cooperación y coordinación sin coacción.
Para Friedman, atribuir por ello, al libre mercado mayores desigualdades, es un interpretación errónea, pues en su convicción cuanto más capitalista es un país menor es la parte de renta que se paga por lo que se considera capital, y mayor la que se paga por servicios, y ello conduce a una menor desigualdad que otros sistemas de organización.
El capitalismo, dice, por una parte ha disminuido el grado de desigualdad, siendo menor en los países capitalistas que en los comunistas, y por otra, el desarrollo y progreso liberó a "las masas" del trabajo agotador, y puso a su disposición productos y servicios que antes eran monopolio de las clases altas, sin aumentar correspondientemente los productos y servicios a disposición de los ricos.
En este tema (como en los otros) las diferencias conceptuales con Friedman respecto al papel del mercado, nacen de constante crítica de Karl Polanyi a la sociedad de mercado autorregulado. Cuestiona el "intercambio" y la "cooperación sin coacción" (supra marqué como Friedman lo enseña como ventajas del capitalismo), puesto que según Polanyi, para que se realice esa distribución "por el mercado" se necesita que el trabajo, la tierra y el dinero sean tratados como mercancías, y a su vez ello está íntimamente vinculado con las motivaciones que llevan a los hombres a producir, en tanto que en una sociedad con mercado autorregulado es imperante intervenir en la producción-ingreso para que funcione el mecanismo de mercado, quien no se avenga a él está fuera no solo del mercado sino de la sociedad.
Por una cuestión metodológica, voy a tratar como dos puntos, lo que Polanyi llamó las "mercancías ficticias", y como otro, su postura respecto a la motivación económica del hombre para producir.
1. Al estar controlada la economía por un sistema de mercados es necesario un mercados para cada elemento de la industria, porque sólo de este modo todas las decisiones referidas a la producción y distribución de bienes puedan responder a las leyes de la oferta y la demanda. ¿qué ocurría entonces con el trabajo y la tierra? Se crea una ficción, los asimilan a las mercancías y los tratan como a éstas. Estas "mercancías ficticias" tienen desde allí su propio precio de mercado y su propio mercado. El uso del trabajo ® precio: salario. El uso de la tierra ® precio: renta. El uso del dinero ® precio: interés.
Veía en el mercado del trabajo y la tierra un gran peligro ya que al incluir a los seres humanos y los recursos naturales en el mecanismo de mercado significa subordinar la sustancia misma de la sociedad a las leyes del mercado, ergo la sociedad se subordina a esa economía de mercado con un mecanismo ajeno a la decisión humana controló a partir de allí al hombre y la naturaleza.
Para Polanyi el uso del trabajo en la economía de mercado fue una de sus mayores preocupación, veía en la instauración del mercado laboral la cosificación del hombre, el sometimiento de sus aspectos sociales y espirituales a su capacidad productiva, se basa en que como no es la "mercancía" quien decide donde va a ser vendida o como se la usará, en un mercado autorregulado por la oferta y demanda, si la oferta de mano de obra era excesiva, lleva a aceptar las condiciones que la demanda imponga para obtener el sustento (vg.: la movilidad laboral).
En forma opuesta Friedman asevera que "contrario a lo que piensa mucha gente, se refiere a las fuentes de la renta. Cuanto más capitalista es un país menor es la parte de la renta como capital, y mayor la que paga por los servicios humanos"
Entiendo que si bien es cierto que al ser manejado por la oferta y demanda el trabajo, esto produjo en muchos momentos la explotación de muchos hombres por otros, ante ello se dictaron leyes de protección al trabajador ® esto es por la intervención del estado, pero esta intervención es porque ante una deformación por abuso de algunos hombres es que debe estar el Estado para tomar las medidas que eviten tales males. Al Estado corresponde salvaguardar a su nación. No quito mérito al análisis de Polanyi y tambien acepto, que tal vez esas mismas medidas que dentro del capitalismo llevaron a la protección de los trabajadores no sean más que el resultado de lo que Karl Polanyi llama la autoprotección de la sociedad.
Me convence Friedman cuando dice que en el capitalismo los seres humanos tienen mayores oportunidades de desarrollar sus aptitudes, pues me parece que la competencia no es un espantoso monstruo. Creo que como en casi todas las acciones, actitudes del ser humano, en sí misma la competencia no es ni buena ni mala. Puede ser destructiva si es desmedida, sin límites éticos, pero tal vez ingenuamente pienso que sin perjuicio que se tomen las medidas que no permitan los excesos, somos los mismos seres humanos los que determinamos su condición como valor positivo o negativo, puesto que el mercado regido por las leyes de la oferta y demanda implica una continua competencia, se alimenta de ella, pero los limites estan dados por la ética de los propios seres humanos, me resisto a aceptar que se considere al ser humano como incapaz de elegir, en él esta hacer de la competencia un valor que lo lleve a su perfeccionamiento, o un defecto que lo lleve a infringir cualquier regla-normal legal o ética para el "supuesto" éxito, en tal caso (salvo que se trate de una sociedad corrupta lo cual también lo determinan los hombres puesto que las sociedades son los hombres que la componen), existen dentro del mecanismo tanto económico como político las medidas que sancionen dicha actitud, no porque va en contra de la "moral" impuesta por el Estado, sino porque y en la medida que afecta la libertad de los otros hombres, ya sea la libertad a competir en condiciones de equidad (y digo equidad, no igualdad), a no ser estafados, a gozar de iguales oportunidades dadas condiciones similares.
En cuanto a la tierra, Polanyi señala que la aparición del mercado de tierra fue la respuesta al desafío planteado por el crecimiento de formas de capitalismo distintas de la comercial. En primer lugar, el capitalismo agrícola trajo consigo los cerramientos y las conversiones de tierras cultivadas en pastos, para responder a la mayor rentabilidad de la lana. En segundo lugar, el capitalismo industrial requería tierras para instalar las fábricas y las viviendas para obreros. Y, por último, el crecimiento de las ciudades industriales con la necesidad casi ilimitada de alimentos y materias primas.
2. El motor del mercado laboral estaba, para Karl Polanyi, en el hambre y la ganancia, que movía a las personas: a) a unas ofrecer su trabajo para poder comprar con el salario lo indispensable para la vida, b) a otras, los empresarios, el afán desmedido de ganancia.
La ficción creada por el laissez-faire de que el uso del trabajo, la tierra, el dinero fueran considerados mercancías, dio origen a la efera económica que se impuso sobre las demás de la sociedad, y llevo a determinarla en función del mercado.
"El mecanismo de mercado se volvió determinante para la vida del cuerpo social", nos dice Polanyi. "Este nuevo mundo de ?motivaciones económicas? se basó en un engaño. En sí mismos, el hambre y la ganancia no son más "económicos" que el amor y el odio, que el orgullo o el prejuicio. Ninguna motivación económica es económica en sí misma."
Para Polanyi, las motivaciones económicas, son relativas, dado que las razones por las que los hombres trabajaron y trabajan, produjeron y producen distintos bienes, son muy variadas a lo largo de la historia. Los incentivos surgen de varias fuentes: costumbre, tradición, motivaciones religiosa, lealtad.
Polanyi no negaba la presencia de los motivos económicos, sino que resaltaba con insistencia su carácter de accesorio, y con ello pretendió demostrar que solo en una sociedad capitalista, tales motivaciones rigen al hombre, puesto que la única forma de obtener ingresos es a través del mercado.
Ve el "afán de ganancia" como si fuera el único motivo, o, al menos, el principal en el funcionamiento del mercado. Mientras que la "necesidad de sustento" sería simplemente la forma de introducir en el mercado a todos aquéllos que no lo hicieran voluntariamente, coligiendo que así las motivaciones de la economía de mercado serian el "beneficio". Para quienes acuden al mercado en busca de ganancias, dando forma al mecanismo (su beneficio ® la ganancia); y para los que, impulsados por la necesidad de ciertos bienes, que sólo se obtienen en el mercado, deben someterse mecanismo (su beneficio ® el ingreso que le permite adquirir lo necesario para saciar su necesidad). Es por esto, según Polanyi, que los miembros de una sociedad de mercado autorregulado creen estar dirigidos por estas dos motivaciones.
Asegura que ello es una falacia, que sin perjuicio que la economía de mercado trajera dependencia de bienes materiales, en el hombre los móviles económicos no son los únicos incentivos para trabajar. Pues él actua por diversos motivos que interactuan, como el honor, el respeto a sí mismo, y que al reconocer las motivaciones recién mencionadas, se pensó que el hombre se componía de dos componentes, uno afín al hambre/ganancia y el otro al honor/poder, que erróneamente los utilitaristas llamaban al primero "material, económico, racional" y al segundo "ideal, no-económico, no-racional", y daban a la parte
económica de la naturaleza humana el sello de la racionalidad, lo cual Polanyi lo tacha de falso.
Explicaba entonces Polanyi, que no hay nada específicamente "material" en el hambre y en la ganancia, y que el honor, el poder no son "mas elevados" que el hambre o ganancia, que no existe diferencia entre la ganacia, el amor o el odio. Que tal dicotomía que llevaba al determinismo económico era la más absurda de las mentiras. Y que había que romper con esa idea que fue "creada" e "impuesta" por el liberalismo, el cual NO es una condición humana natural, y que por tanto puede y debe ser reemplazado por una organización que subordine la esfera económica a su lugar en la sociedad, para que ésta no sea regulada por instituciones autómatas, sino por las propias decisiones humanas.
Libertad y papel del estado en relación al mercado
Al inicio de este trabajo se dejo sentado que para Milton Friedman la libertad económica es un requisito para la libertad política, en atención a que la dispersión del poder político del económico que de esa forma evita tiranías. En tal sentido el mercado proporciona esa "mano invisible" de la que hablaba Smith, agregando Friedman a la concepción de Smith, que a su vez el mercado hace las veces de medio de información que se expresa a través de los precios. Siendo el Estado el que debe proporcionar el marco legal para permitir el libre desenvolvimiento del mercado, servir de apoyo para cumplir los incentivos
creados por los precios, y evitar toda deformación, exceso que pueda producirse en el mercado.
Así uno de los objetivos del liberal, para Milton Friedman, es dejar que los problemas éticos sean resueltos por el propio individuo. Que los dilemas éticos de relevancia se dan en una sociedad libre donde el individuo debe decidir ?qué? hacer con su libertad.
La libertad se da en el plano de las relaciones entre la gente, y del propio individuo en el ejercicio de su libertad.
Ahora, como el hombre es un ser imperfecto, el problema de la organización social es el de impedir que aquellos que son "malos" hagan el mal, y permitir que los "buenos" puedan hacer el bien. Entonces el problema básico es como coordinar las actividades económicas de un gran numero de gente.
La tarea es saber conciliar la interdependencia de las personas entre sí con la libertad individual. Y ello se puede lograr 1) con el uso de la fuerza (estados totalitarios); 2) por la cooperación voluntaria de los individuos, y ésta es la técnica del mercado.
Por ello, para Friedman, el intercambio (mecanismo de mercado) genera la coordinación sin el uso de la fuerza.
Claro está, es básico mantener el cumplimiento de ley, del orden para que otros no abusen ni física ni por otros medios de un individuo, así como mantener el cumplimiento de la palabra, esto implica la instrumentación de contratos que puedan como la ley requerir el cumplimiento.
El gobierno es imprescindible en su concepción, para determinar "las reglas del juego", como árbitro para dirimir los conflictos y para impedir los excesos e incumplimientos de tales reglas de juego.
El mercado con su mecanismo, por su parte, reduce las cuestiones a decidir por medios políticos, y por tanto el gobierno ya no necesita participar directamente.
Por todo ello, enseña Friedman, el mercado al traer la libertad económica, y a través de ésta la libertad política, que es la que impide que un hombre ejerza fuerza sobre otros hombres, los coaccione, garantiza la libertad de los hombres. Y dado que la amenaza a la libertad política es el uso de la fuerza por quienes gobiernan, por tanto, al reducir la intervención del estado en las actividades humanas, manteniendo separados el poder económico y político, estos se contrarrestran y así aseguran la libertad de los individuos.
Las funciones, en definitiva que le cabe al Estado en la sociedad libre son:
- ofrecer el medio por el que se puedan modificar las reglas,
- mediar en las diferencias que surjan entre los individuos; e
- imponer el cumplimiento de las reglas a aquellos que las vulneraran.
Reconoce Friedman la deformación del mercado que implica la existencia monopolio, el que inhibe la libertad efectiva de intercambio, puesto que el intercambio a que refiere la sociedad libre, es el intercambio voluntario y ello es posible cuando existen alternativas. Esto debe ser impedido, y en caso el Estado debe arbitrar los medios, de ello resultan las leyes antimonopólicas.
Karl Polanyi, en estos puntos, difiere, desde el momento que su obra es una crítica a la sociedad de mercados autorregulados pero no deja de reconocer que ella trajo consigo el reconocimiento de libertades valiosas para el hombre, es más en "La Gran Transformación" así lo dice: "El descubrimiento de la sociedad es así el final o el renacimiento de la libertad", lo demuestra además cuando muestra su temor al decir en su artículo "Nuestra obsoleta mentalidad de mercado", "El colapso de la economía de mercado pone en peligro dos tipos de libertades: unas que son convenientes y otras que son dañinas".
Este autor, hace un análisis moral-religioso en lo que hace a las libertades del hombre y el papel del Estado, puesto que su critica de la economía de mercado se basa en que la sociedad queda subordinada a un mecanismo (regido por las leyes de la oferta y la demanda) que se autorregula donde las decisiones son tomadas en base a los precios a través de los cuales se comunica el mercado, ateniéndose al juego de oferta-demanda, y el hombre termina siendo gobernado por el mercado. En esta organización económica donde "su" trabajo y por tanto él hombre mismo es tratado como una mercancía pues debe someterse a las reglas de la oferta y demanda en el mercado laboral.
Polanyi no está en contra del mercado, solo considera que debe encontrarse una mejor organización que no subordine la sociedad a la organización económica, sino que la organización económica esté subordinada a la sociedad, pues sociedad son los hombres que la componen.
Esto resulta claro cuando el escribía "Sería todo un logro que, junto con el mercado, desaparecieran la libertad de explotar a los semejantes, la libertad de realizar ganancias exorbitantes sin ofrecer servicios equivalentes a la comunidad, la libertad de impedir que las invenciones tecnológicas se usen en favor del público o la libertad de beneficiarse de las calamidades públicas manipulándolas secretamente para lucro privado. Pero la economía de mercado en que estas libertades han prosperado también ha producido libertades a las que atribuimos un valor elevado. En sí y por sí mismas apreciamos la libertad de conciencia, la libertad de palabra, la libertad de reunión, de asociación, de elegir el empleo. No obstante, en gran medida éstas son un subproducto de la misma economía que produjo aquellas libertades nocivas".
Mientras, Friedman manifiesta que es el capitalismo que a través de la libertad económica viabiliza la libertad política, ya que reduciendo la intervención estatal queda en la esfera del individuo la libertad de elegir y el uso de su propia libertad, y que a su vez el mantener separados el poder político y económico es otra garantía para la libertad del hombre, puesto que dispersa los poderes y hace que éstos se contrarresten entre sí.
Polanyi cree firmemente que el hombre, la sociedad, tendrá toda la libertad que desee crear y proteger; que en la sociedad humana no hay un determinante único. Las garantías institucionales de la libertad personal son compatibles con cualquier sistema económico. Solo en la sociedad de mercado el mecanismo económico configuró leyes. Polanyi, da una vuelta de tuerca sobre el tema de la problemática económica de la sociedad y su visión es que lo que se ve como el problema del capitalismo es en realidad el problema más amplio de una civilización industrial, e identificaba dos tendencias entres los que se percataban de este problema, los que creían en las elites y aristocracias, en los directorios y la gran empresa que opinan que la sociedad debe adaptarse estrictamente al sistema económico para así conservarlo sin alteraciones; y los que piensan que en una sociedad verdaderamente democrática el problema de la industria debería resolverse mediante la intervención organizada de los mismos productores y consumidores.
3. Milton Friedman ? Karl Polanyi
Debe considerarse que Friedman y Polanyi están colocados en puntos de análisis diferentes. Friedman hace un estudio ecónomico con derivaciones políticas respondiendo a su postura neoliberal, en tanto que Karl Polanyi escribe como severo crítico al capitalismo, no aboga por una postura ni económica ni politica determinada, aunque se ve en él una influencia socialista, su obra es un mix de diferentes ópticas: económica, antropológica, política, sociológica, algunos dirán que es hace antropología económica, sin embargo ello sería limitar la visión de su obra. Ambos responden al diferente contexto en que nacieron y vivieron, a sus propias historias personales de vida, todo muy diferente, resultando de lo anterior que los 28 años más joven que es Friedman resulte ser un factor de menor importancia.
Milton Friedman
La economía contemporánea, se caracterizada por el dominio de cierta racionalidad, donde predomina el pensamiento neoliberal, neoclásico o monetarista, sin perjuicio de que ello no garantiza la aplicación completa de los modelos que sustentan dichos pensamientos. Y éste economista es uno de sus mayores defensores y exponentes.
Desarrolla su teoría dentro de su postura capitalista-competitiva, defendiendo valores como la competitividad, la maximización, el individualismo?
Pero no debemos creer que está errado o que tiene la verdad en sus libros, los modelos económicos parten de un cierto tipo
de racionalidad, de conceptos tomados como verdaderos del conocimiento científico, que pueden ser o no correctos. Pero hoy por doy es habitual dar por verdaderos los fundamentos económicos cuando lo que debemos entender es tal vez ellos simplemente sean los más aceptados en el lugar y en el tiempo actual, quizás porque en un momento y lugar determinado han dado buenos resultados, esto no conlleva la certeza de que siempre y en todo lugar será así.
Friedman liga a la libertad con el libre mercado. Ahora si la libertad que implica que el el hombre deba cumplir las leyesdel mercado, tales leyes de mercado adquieren un valor ético, y aquí viene la pregunta que aún no tiene respuesta ¿qué ocurre con los perdedores, con los no aptos para la competencia, con los no productivos? Estos quedan librados a la suerte, de que los algunos ganadores los tomen a su cargo, lo que es posible suceda para que el mercado con sus reglas permanezcan puesto que estas reglas hicieron ganadores a los ganadores.
En la actualidad, donde el escenario es cambiante y los mecanismos ya no dan resultados y resultan obsoletos, la frustración crece, sin embargo, ante una falta de respuesta, el individuo que no encuentra alternativas válidas adecua sus actitudes y pensamientos a lo conocido y se sigue con más de lo mismo sin lograr romper el circulo, como si se paseara en el laberinto como si ello fuera lo deseando cuando en realidad se permanece en él porque no se encuentra la vía que lleve a la salida.
Karl Polanyi
Realiza un análisis de la sociedad capitalista, en él se limita a mostrar que el mercado produjo unos efectos perversos y que la sociedad se defendió haciéndolo retroceder y continuará retrocediendo, a menos que se vuelva a caer en el error de la mentalidad de mercado. Propone reemplazar la organización económica de mercado por algún tipo de socialismo, donde las decisiones relativas al trabajo se tomen democráticamente y no por un mecanismo que se rige por las leyes de la oferta y la demanda y por tanto por empresarios con un afán desmedido de ganancia.
Es consciente que el nacimiento del mercado trajo consigo un auge de libertades para el hombre, pero su rechazo es al mercado como un mecanismo autorregulado que termina por "cosificar" al hombre y los recursos naturales. No se oponía al mercado como tal, sino de aquellos mercados que regulan la economía porque esto implicaba que hubiera mercados de trabajo y de tierra, que, al no estar regulados externamente, traían consecuencias "nefastas sobre el tejido social".
En los mercados aislados veía un instrumento útil para poder actuar sobre la economía, siempre y cuando la regulación no dependiera del propio sistema sino de las decisiones humanas porque ve necesaria la regulación pero democrática, y ante ella se perderán libertades, pero lo que importa es en el resultado de operación de libertades perdidas y ganadas, que las ganadas sean mayores y sean las que dignifican al hombre como ser humano y no como seres que explotan a otros, es decir, si las pérdidas de libertad son compensadas por las ganancias.
No fue claro sobre el modo en que debería realizarse en la práctica esa especie de socialismo que propugna. Su labor académica la dirigió a estudiar la historia para: criticar el capitalismo, por sus terribles consecuencias, y a partir del estudio de las economías pre y capitalistas, encontrar la forma de superar la mentalidad de mercado y con ello al capitalismo.
Miró el pasado para descubrir modos de organizar la sociedad, sin hacer una propuesta concreta de solución y como implementarlo en la práctica, tal vez porque no encontró esa solución o la forma viable de llevarla a los hechos. De lo contrario, por lógica, hubiera dedicado sus esfuerzos más que a criticar el capitalismo, a difundir esa solución. En La Gran Transformación, critica al capitalismo y propone subordinar el mercado a la sociedad democrática, pero no dice como ni su contenido.
4. Fuentes de Consulta
Milton Friedman "Capitalismo y Libertad", p. 24
Karl Polanyi "La Gran Transformación" p. 144/145
Karl Polanyi "Nuestra Obsoleta Mentalidad De Mercado" Artículo publicado originalmente en Commentary 13, 1947, 109-117. Esta versión proviene de Polanyi, Karl. Economie primitive, arcaiche e moderne, Giulio Einaudi editore, Turín 1980. Tradución tomada de www.red-vertice.com/fep/texto09.html
Economía y Sociedad en el Pensamiento de Karl Polanyi - Tesis Doctoral Javier A. García Sánchez - Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales - Universidad de Navarra - Pamplona, 1998
Historia del Pensamiento Económico: Milton Friedman - Publicación Roberto Mosquera, Eugenio Paladines, Andres Tomaselli, Luis A Vaca, en www.gestiopolis.com
Susan George ? Breve historia del neoliberalismo: veinte años de economía de élite y de oportunidades emergentes para el cambio estructural ? Conferencia sobre Soberanía Económica- Bangkok, marzo 1999 ? Millennium Round.org ? www.attac.org/fra/toil/doc/georgees.htm
Las alternativas creibles del capitalismo mundializado - FranV ois Houtart ? home.planet.nl/alca.htm
Karl Polanyi: Crítica del mercado, Crítica de la economía ? Carlos Prieto ? UCM ? Política y Sociedad N° 21, 1996 www.ucm.es/info/socio1/prietokp.html
Disyuntiva: Democracia o Crecimiento, R. Perez Ayala, Excelsior Editorial - www.excelsior.com.mx/9607/960710/art08.html

Nilda Gladys Fretesgladysfretes[arroba]arnet.com.ar
"Entorno Económico de los Negocios"
1er año - MBA -Administración Estratégica
Escuela de Economía y Negocios Internacionales
Universidad de Belgrano

VER MÁS

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ENTRADAS/SPOTS